Atraer clientes por primera vez a tu restaurante, es una cosa, lograr que regresen a menudo, exige un poco más. Depende, en gran medida, del resultado de esa primera experiencia. La primera impresión es importantísima, ya hemos hablado de ello. Pero ¿qué más puedes hacer?

En esta ocasión te presentamos estrategias probadas para lograrlo. ¡Sácales provecho!

1. La personalización: hazlos sentir especiales

El mercado en general se está convirtiendo en una oferta “a la carta”, al gusto, y la gastronomía no puede quedar fuera de esta tendencia.

Hoy en día los clientes no desean los mismos productos que todos, los quieren hechos a su medida. Así que no hay forma más eficaz de hacerlos sentir especiales en tu local, que ofrecerles alimentos y bebidas preparadas a su gusto.

Al quedar plenamente satisfechos, es altamente probable que se transformen en clientes frecuentes, y más aún, probablemente a muchos de ellos en se conviertan en “embajadores” de tu negocio, ¡la mejor publicidad!

Ahora bien, ¿cómo hacerlo?

Pues, ¡no te compliques! Solo escucha a tus clientes, directamente en tu local y por todos los medios de comunicación que les ofreces, ellos te lo dirán.

También puedes darles opciones personalizar algunos platillos, por ejemplo, las ensaladas, los sándwiches, las pizzas, o los desayunos, caben fácilmente en este esquema. Lo que dice “crea tu propio (a)” lo que sea, en el menú, siempre es bien recibido. Otra opción es colocar alternativas de ingredientes para ciertos platillos enfocados en quienes sigan alguna dieta especial o no consuman ciertos productos.

Y finalmente, usar los datos a tu alcance para recordar sus nombres, sus perfiles, sus preferencias, eso de verdad se agradece por los clientes y les hace sentir especiales.

2. Toma en serio la salud y el medio ambiente

Estar sanos es algo que está siendo revalorado, especialmente por las nuevas generaciones. Eso tiene todo que ver con esta industria. Los clientes hoy esperan ingredientes y formas de preparación cada vez más sanas, sin perder sabor y variedad. Comer sano y rico les causa mucha satisfacción, así que sería un error no pensar en seguir esta tendencia que cada día gana más adeptos.

Hay muchas líneas de acción que puedes tomar en ese sentido, desde cambiar ingredientes procesados por otros más frescos o sanos, hasta incorporar opciones como las hamburguesas vegetales, los poke bowls, los desayunos saludables, postres sin azúcar, platos bajos en grasas, etc.

De hecho, no necesitas cambiar todo tu menú, basta con ofrecer nuevas alternativas y luego comunicarlas a través de tus redes, página web, blog, etc., contando de qué manera estás cuidando el medio ambiente y la salud.

3. Vende felicidad: eleva la experiencia del cliente

Si algo hay de sobre hoy en día, es oferta gastronómica. Que tus platillos estén “bien” ya no es suficiente para lograr clientes frecuentes habiendo tantas opciones, hace falta que pasen una experiencia grata en tu local. Así que conviene cambiar el enfoque. Deja de “vender comida” y ¡comienza a “vender felicidad”!

Para lograrlo, comienza por mapear y analizar la experiencia actual de tus clientes, luego define cómo sería la experiencia ideal. Considera que actualmente para obtener la máxima satisfacción de los clientes tu negocio necesita virtudes como:

• Conveniencia: Es decir, las facilidades que le das a tus clientes para encontrar, comprar e incluso pagar por tus productos (amplios horarios, formas de pago cómoda y variadas, etc.)
• Velocidad de servicio: Muchos clientes estarán buscan comer rápido, otros hacerlo sin prisas, y debes poder darles a ambos lo que necesitan.
• Máxima hospitalidad: Una sonrisa real y una preocupación genuina por la comodidad y satisfacción del cliente, se sienten de verdad y convierten la visita en una experiencia positiva. El personal debe ser proactivo en el servicio, hacer recomendaciones según los gustos del cliente, y en general, tener detalles amables, así como agradecer la visita al final.
• Ambiente perfecto: Al comer fuera, los clientes quieren estar en un sitio agradable. Nunca permitas que su experiencia se vea alterada por ruidos molestos, olores desagradables o mobiliario defectuoso.

Tras este análisis, podrás re-diseñar la experiencia del cliente mejorando cada punto, y re-definir la experiencia cada vez que el restaurante lo necesite, de preferencia, documentando el proceso y enseñándolo a todo tu equipo.

Al mejorar la experiencia al cliente no solo aumentarás tus ventas y clientes frecuentes, sino que también disminuirán las quejas y reclamaciones, mejorarás el clima laboral, e incluso la reputación del negocio. ¡Hasta podrás ahorrar dinero en campañas de marketing!

La mayoría de los restaurantes ponen mucha energía y recursos en atraer clientes, y se olvidan un poco del siguiente paso: la fidelización. Conservarlos es más importante. Los clientes fieles o frecuentes son los que en realidad mantienen un restaurante. ¡No escatimes en hacerlos felices!