Los hábitos de compra de los consumidores han cambiado en el último mes a consecuencia del aislamiento social que se ha suscitado en respuesta al COVID-19.

Tanto la disminución de comensales en cafeterías y restaurantes, como una menor cantidad de personas acudiendo a los supermercados, han hecho que dueños y proveedores replanteen su manera en la que siguen y seguirán ofreciendo sus servicios durante esta contingencia.

En este artículo te compartimos algunas de las medidas que han puesto en acción para contrarrestar las pérdidas económicas, más allá del necesario y frecuente lavado de manos, que es la medida más importante y universal de prevención en este momento.

La clave está en la capacidad de adaptación 

Debido a una menor presencia de consumidores en las calles, ha sido necesario que tanto proveedores como propietarios de negocios, se adapten y ofrezcan nuevas alternativas para obtener un flujo de ingresos que les permita seguir cubriendo sus costos operativos.¿Cómo han logrado adaptarse?

Activar y fortalecer el servicio a domicilio

Además de recaer en los servicios tan conocidos como UberEats, DiDi Food o Rappi, también los dueños de negocio han activado sus propios canales de entrega a domicilio para no dejar que la competencia gane su mercado.

Apps móviles 

Si bien estas aplicaciones llevan mucho tiempo operando para facilitarle la vida a los consumidores, actualmente son más los restaurantes que se han sumado a ellas para continuar ofreciendo sus platillos. Además, les han abierto las puertas a nuevos consumidores y la oportunidad de que sus repartidores reciban una ayuda adicional gracias a la iniciativa de las propinas voluntarias.

Pick&go

Esta modalidad les permite a los restaurantes llegar a un mayor número de consumidores aun y cuando no se encuentren en la misma zona. Este esquema permite que el consumidor recoja su pedido en tienda bajo las normas de sanidad correspondientes. 

Retos que enfrentan los supermercados

Las medidas sanitarias necesarias actualmente, también impactarán en el comportamiento de los consumidores una vez que este aislamiento social termine. ¿Cuáles serán los retos a los que se enfrentarán los supermercados cuando esto suceda?

Menos socializar y más higiene

En un país como México, el consumidor está acostumbrado a tomar, intercambiar y oler para elegir sus productos, sobre todo frutas y verduras. Bajo este nuevo esquema de salud, los supermercados deberán continuar reforzando la importancia de evitar este tipo de situaciones para reducir el riesgo de contagio, no solo del COVID-19, sino de cualquier otra enfermedad que pueda entrar al organismo por contacto o vías respiratorias.

De hecho, uno de los servicios que antes de la contingencia brindan algunos de los proveedores de frutas y verduras, es lavar los productos al ingresarlos a a los establecimientos. Es un servicio que puede negociarse sin que afecte el precio de los productos. Se requiere solo tener el equipo de tarjas adecuado con tres tinas y tarjas identificadas para el cambio de cajas de proveedor a internas y asegurar mejor la inocuidad.

Incremento en las compras online

Aun cuando la cuarentena termine, los consumidores tardarán un tiempo en sentirse seguros para salir a las calles. Esto representa un reto para los supermercados, ya que muchos de ellos no cuentan a día de hoy con suficientes shoppers para cumplir con la alta demanda.

Fomentar la higiene de productos

Los hábitos de limpieza de los alimentos no eran tan exhaustivos como lo son ahora. Actualmente es necesario que tanto los productos frescos, como aquellos que vienen en envases, se limpien y desinfecten previo a su consumo. Esto no es algo que todos los consumidores hicieran previo al COVID-19.

Sin embargo, es responsabilidad de tiendas y supermercados el hacer hincapié en adoptar estos nuevos hábitos, no solo hoy, sino a partir de ahora y para siempre.

Finalmente, es importante ser conscientes como ciudadanos, dueños y consumidores, de que esta contingencia ha cambiado por completo los hábitos relacionados con la higiene y la alimentación. Hábitos que sin duda debemos seguir incluso una vez terminada esta contingencia.