Metas para empezar bien el año en tu restaurante
Publicado por Karla Garza on 30.10.23
Cuando un año comienza, los nuevos propósitos se ponen de moda entre la gente. Y también las organizaciones exitosas comienzan el año con un empuje similar: las metas anuales.Eso es porque definir metas es, especialmente en negocios como los restaurantes, muy útil para guiar la gran variedad y cantidad de tareas con las que hay que hacer malabarismos a diario.
Y, sobre todo, trazar metas es trazar un destino, y eso ayuda a avanzar. De hecho, como Bruce Lee decía, una meta no necesariamente se hace para ser alcanzada, muchas veces sirve como una dirección a la cual apuntar.
Incluso en tiempos de incertidumbre – como la causada por una pandemia global-, en los que parece difícil planificar el futuro, lo mejor es hacerlo, y hacerlo considerando los factores que han afectado y pueden seguir afectando todos los procesos, pero concentrándose en lo que sí se puede hacer, no en lo contrario.
Ahora bien, para definir nuestras metas, conviene tener en mente los objetivos clave del restaurante o negocio en particular. Y en esta industria, suelen tener que ver con alguna de estas cuatro áreas centrales:
El personal y el servicio
De la buena capacitación del personal operativo depende principalmente la calidad de la atención al cliente que ofrece tu equipo y por ende, el resultado entre el público, la experiencia del cliente. Y de la capacidad de la organización para hacer felices a los clientes, básicamente, depende el éxito del negocio.
Así que, contemplar este aspecto entre las metas anuales siempre tiene sentido.
Además, si el personal no está bien capacitado y también, bien comprometido con la organización y con la atención al cliente, no ayudará mucho al cumplimiento de los objetivos del restaurante.
Encontrar formas de motivarlos y retenerlos, es vital, así como procurar su seguridad, crecimiento y satisfacción laboral. Muchas buenas metas pueden trazarse alrededor de estos aspectos, porque como ya se ha dicho, invertir en tus colaboradores siempre contribuye al éxito del negocio.
La comida
Claro, el centro, el corazón de lo que ofreces, el producto, también debe ser lo mejor que puedas ofrecer. Aquí pueden trazarse metas sobre el tipo y calidad de la comida; sobre la elevación de los estándares con los que se prepara y con los que se presenta; sobre el enfoque sostenible y/o saludable del menú, e incluso pueden girar en torno a los proveedores.
O puede ser simplemente actualizar el menú. Lo importante será estar al día con la demanda y las tendencias, para seguir siendo competitivos en este gran mercado.
El marketing
Todo lo que tiene que ver con la imagen, la marca y su promoción, requiere obligadamente un espacio aquí.
Se puede pensar en mejorar la definición de la identidad y la personalidad del restaurante o la marca; o la publicidad, o la atención en redes, los programas de fidelización, los anuncios, etc.
Las finanzas
Mantener finanzas sanas garantiza poder seguir funcionando y prosperando. Este rubro puede desgranar muchas metas: relacionadas por ejemplo con el flujo de ingresos, con el impulso a los tiempos lentos o de baja demanda, con los costos, con los inventarios, con las ventas, con nuevas fuentes de ingresos, con mejorar las ganancias, etc.
Todos estos aspectos son importantes, así que lo ideal sería combinarlos en nuestra lista de metas, seguro en cada rubro tu negocio tiene áreas de oportunidad. En resumen, no hay que olvidarse de tratar al restaurante como un destino, no solo como un establecimiento de comida.
Por último, una vez definidos los aspectos sobre los que se centrarán las metas, solo resta hacerlas específicas, medibles, alcanzables y adaptables. E idealmente, dotarlas de una estrategia, de un “cómo” se lograrán.
Con las metas al frente, al final, el negocio tendrá un horizonte más claro.